sábado, 6 de agosto de 2016



MEMORIAS

Ya pasaron más de un invierno y no comprendo por qué sigues naciendo dentro de mí; aún siento tu voz, tu aliento de palabras tan humildes que lo decías con entusiasmo, quiero olvidarte de una vez pero es una estupidez intentarlo.

Recuerdo cuando te envolvías en la ternura de ese amor y nuestra inocencia despertaba el placer de lanzarnos a la aventura de amarnos una vez más y consumirnos hasta el alba; por la culpa de enamorarnos de esa manera; pero todo ya pasó ya nada quedó.

¿Qué será de ti? ¿Qué será de tu sonrisa tan bonita que yo conocí? No quiero imaginar dónde estarás ni con quién me olvidarás, a quién entregarás tu amor en estos momentos más aun tu cuerpo, pero ya pasó.

El polvo tapara con su manta las palabras, los besos, tus caricias. ¡Noche! No quiero que escupas el dolor de la soledad. ¡Noche vete! Llévate mi alma a otros mundos, mis pensamientos pero jamás este sentimiento que guardaré y quedará sepultado e impregnado en los poros de mi cuerpo hasta que el tiempo apague la historia de mi vida.

 Autor: Marco A. Peña

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario