MI CULPA
El viento golpea mi rostro y emergen lágrimas de frío.
Mis manos se arrugan como grietas en el campo; mis labios
se tornan negras por no haber besado a mi madre alguna vez.
Mis ideas se hunden; mis pensamientos caen al fondo de mi
egoísmo; esta noche estoy solo con la amargura de mi ser.
Mi infancia olvidada; mis pantalones apretados y los
juegos de ayer, hoy están a mi lado.
Respirabas mis alegrías, penas e ilusiones; me abrigabas
con tus caricias; ahora que no te tengo siento la desdicha de no haberte dicho
“te quiero” cuando tu corazón aún latía.
Autor: Marco A. Peña
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